Supongo que ayuda el tener ya creado un potente "engine" gráfico y unas herramientas genéricas...
No lo digo por un tema de ventas (aunque ni de lejos este título puede llegar a vender lo que vendería si saliese en PS2), sino desde el punto de vista técnico. Básicamente, el juego está ya arruinado antes de salir. Por un lado, por el control (que solo puede solventarse si Vanillaware decide implentar un modo "clásico" sin control remoto, algo altamente improbable), y por otro, por el aspecto visual: Wii (la Wii nipona, al menos, que es la que nos ocupa) no permite conexión RGB, y esto no es un juego en HD.
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